Tormenta de Fuego!
La historia se repetirá si no ponemos fin a los monocultivos.
Entre el 2 de febrero y el 4 de marzo de 2023, se quemaron 326.000 hectáreas entre las regiones de Ñuble y Araucanía, Chile. Un 61,3% corresponde a monocultivo forestal y un 9,4% a bosque nativo.
Según informa la Corporación Nacional Forestal (CONAF), en el último año se quemaron en Chile 439.221,27 hectáreas, siendo las regiones de Maule, Ñuble, Biobío y Araucanía, las más afectadas.
Como resultado de esta “Tormenta de Fuego”, murieron 26 personas, más de 500 resultaron heridas, 2.450 viviendas resultaron totalmente destruídas, 7.700 personas quedaron damnificadas, más de 8 mil productores agrícolas y de otros rubros resultaron con sus fuentes laborales total o parcialmente dañadas, muriendo más de 22 mil animales domésticos o de ganadería y una cantidad indeterminada de fauna nativa resultó muerta, dañada o forzada a migrar. Además, la contaminación del aire en las comunas más afectadas alcanzó, en dicho periodo, récords mundiales.
Los incendios forestales se propagan y crecen más allí donde se practica el monocultivo forestal de pinos y eucaliptus. Estos árboles son altamente inflamables y las hojas y trozos de corteza de eucaliptus propagan el fuego a kilómetros de distancia de los focos activos.
Los monocultivos forestalesson un importante factor de riesgo para la propagación, frecuencia, intensidad, extensión, duración y gravedad de los incendios forestales y por ello su uso debería estarprohibido en el actual contexto de cambio climático global.
Denunciamos a las empresas Arauco, CMPC y Forestal Mininco y al Estado de Chile como los principales culpables de esta catástrofe.
En Chile, éstos monocultivos son propiedad, a partir del decreto de ley 701 impuesto bajo la dictadura civico-militar chilena que revierte la restitución de tierras mapuche iniciada durante un gobierno popular, de Empresas Arauco, CMPC y Forestal Mininco. Estas empresas son responsables de la gravedad de los recientes incendios forestales por no haber implementado medidas preventivas, de contención, mitigación y protección de las comunidades rurales, de manera suficiente, oportuna y efectiva. Aún hoy sus intentos por ayudar a las comunidades son completamente insuficientes comparados con las cuantiosas pérdidas.
Denunciamos y responsabilizamos a los grandes grupos político-empresariales y a quienes integran su brazo lobbista -la CORMA- como los principales culpables de esta catástrofe. La combinación de industria forestal, negligencia de autoridades y conflictos de intereses, sumado al cambio climático y deterioro de la biodiversidad, viene produciendo cada vez más daño a las comunidades rurales, afectadas por las consecuencias del monocultivo que incluyen sequía, erosión, aumento de los mega-incendios, y destrucción de los modos de vida tradicionales y la agricultura familiar campesina.
Es necesario detener las empresas Arauco, CMPC y Mininco – así como a sus aliados y empresas similares en otros territorios – y poner fin a su método de producción maderera: el monocultivo de pinos y eucaliptus,
por los severos riesgos que representa para la seguridad nacional, para la supervivencia de las comunidades humanas y para la calidad del aire de todo el planeta.
Denunciamos que el Estado de Chile no reconoce las graves vulneraciones a los derechos básicos y sociales cometidas durante los incendios, la negligente respuesta de sus instituciones, la insuficiente ayuda otorgada a los damnificados y la complicidad de las entidades públicas que debieron promover y fiscalizar las medidas necesarias para evitarlos.
Mientras las comunidades y los ecosistemas sufren los desastres ambientales de la industria forestal, ésta sigue en impunidad anotando récords de utilidades y dejando, literalmente con nada a las familias de las zonas rurales. A las autoridades nacionales, regionales y comunales les decimos, nuestras ciudades y poblados no deben ser zonas de sacrificio ni trampas de fuego.
Detener a los culpables: Arauco, CMPC, Mininco, Empresas de la industria papelera y maderera, Vanguard y BlackRock
Pedimos a la comunidad internacional, que deje de consumir los productos de estas empresas y que detengan estas empresas criminales y a todos sus aliados – El sector financiero en el hemisferio norte tiene responsabilidad por financiar a Arauco, con Vanguard y BlackRock como dos de los los mayores inversores institucionales en COPEC SA (Arauco).
Presionar al Consejo de Administración Forestal (FSC) para que se retire la certificación a estas empresas, así como a todas las entidades que hayan otorgado certificaciones similares, porque es evidente que el manejo de sus plantaciones No es “ambientalmente responsable”, ni respeta los derechos de los pueblos indígenas bajo el convenio 169 de la OIT.
Solidaridad internacional: no nos silenciaron
Hacemos un llamado a la solidaridad y a No olvidar!: Los medios de comunicación chilenos han dejado de mostrar a las familias que siguen sin casa, sin servicios básicos y sin trabajo. Pedimos entonces no dejar de visibilizar esta tragedia e intensificar las campañas solidarias que estén a su alcance para ir en ayuda de los sectores damnificados y de la Naturaleza, gravemente amenazada por esta industria extractivista disfrazada de verde.
Nos solidarizamos con todas las comunidades del mundo que se han enfrentado, se enfrentan y se enfrentarán a los incendios provocados por el capitalismo, los monocultivos y la crisis climática.
¡Tenemos que unirnos globalmente y luchar unidas!
Restauración ecológica
Convocamos a una completa transformación del modelo productivo agroforestal que ponga en el centro la vida en la Tierra y limite las ganancias particulares al respeto de las comunidades y de la Naturaleza. Es fundamental que la reconstrucción se haga a partir de la participación de la sociedad civil y de las organizaciones sociales y ambientales, impulsando nuevas formas de vinculación y comunicación con el pueblo, sin depender de los grandes medios controlados por el empresariado forestal y las ayudas centralizadas, tardías e insuficientes.
Hacemos un llamamiento a un día de acción internacional el 24 de Marzo.
Salimos a la calle en solidaridad y con rabia.
Acciones directas a las infraestructuras fósiles, la industria de la pulpa y la silvicultura, o concentraciones frente a espacios públicos significativos.
¿No sabes qué hacer? Puedes tener imágenes/fotos de incendios en distintos lugares del mundo (incluido Chile y posiblemente incendios en tu localidad) y utilizar ese material para demostrar que se trata de la misma historia ocurriendo en distintos lugares.
¡Actúa para responsabilizar, confrontar y detener a los actores responsables de la crisis climática y ecológica!
¿Tienes ya otras acciones? Sabemos que el día 22 puede que tengas acciones relacionadas con el agua u otras acciones en torno al día 24. ¡Está todo conectado! Habla con tu grupo y entiende cómo puedes, en las acciones que ya harás en los días cercanos al 24 de marzo, incluir también lo que pasó en Chile para que no sea invisible y que luchemos juntos por un cambio sistémico para detener la crisis climática y ecológica.
